Cuando me siento en mi escritorio soy presa de mis oscuras quimeras, el tiempo deja de pasar y se estanca en la eternidad de un pasado insondable. Detenerse es morir en el recuerdo, ser para el olvido. En cambio, siempre que el devenir del tiempo, se una al devenir mío y lleguen a concordar en su frecuencia, la paz y la serenidad se encuentran conmigo.
Detenerse es dejarse caer, como presa del tiempo sin cambio. Quizá no se pueda pensar el tiempo sin cambio, pero el detenimiento es aquello que más se le acerca.
Detenerse, no brevemente, detenerse continuamente.Detención y retención parecieran ser siervos del mismo amo, tiempo, pero siempre vestido en la máscara de un recuerdo.
¡Tan caro es pagar el valor de la apatía! ¡Y cuán fácil es vivir de los otros!
Vivir el tiempo sin detenerse...podría llevar a un espíritu a la más alta cima... donde el tiempo se desvele, se des-oculte tal como es, sin recuerdos ni olvidos... un tiempo puro...
¡Qué difícil de imaginar un tiempo puro! ¡Claro! Si no hemos visto ninguna luz, dentro de esta caverna, que nos pueda llevar a ver esa gran Luz, ese 'Tiempo'.
... y como dijera Borges: a por la sombra de haber sido un desdichado
extínguete...
entre gritos de silencio, pero extínguete...
a ti te dedico el alfa y el omega de todas mis golgotas nocturnas...
entre gritos de silencio, pero extínguete...
a ti te dedico el alfa y el omega de todas mis golgotas nocturnas...
He de sobrevivir a todo, aunque el hecho de morir en tus labios silentes, en tu mirada que no mira, en tu alma que no ama... me atrae más, quizá más que toda esta soledad. No importa: la arrogancia revertirá...
lunes, 18 de abril de 2011
Lo lamenta:
ira de Tifón
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recuerdo...
en
18:53
.•Hliðskjálf•.
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